Entre los factores de riesgo a la hora de padecer una trombosis, el doctor Manuel Frías Vargas, médico de familia del Centro de Salud Comillas, Madrid, y coordinador nacional del Grupo de Trabajo de Vasculopatías de SEMERGEN apunta a:
Trastornos genéticos de la coagulación; historia personal o familiar de trombosis previa, o bien de cirugía reciente, especialmente si es de cadera, rodilla o pélvica; embarazo, parto y puerperio; la edad, ya que a mayor edad, aumenta el riesgo, sobre todo a partir de los 60 años; obesidad; tabaquismo; enfermedades autoinmunes como el lupus, y la enfermedad inflamatoria intestinal.
A su vez, dice que se encontrarían la insuficiencia cardíaca, la enfermedad pulmonar, la presencia de venas varicosas o enfermas, historia personal de cáncer, anticonceptivos hormonales con estrógenos o terapia hormonal sustitutiva, la falta de ejercicio o el sedentarismo, situaciones de inmovilización o de reposo prolongado, la predisposición como la diabetes mellitus, hipertensión arterial, dislipemia, entre otros.
“Los hombres y las mujeres mayores tienen aproximadamente el mismo riesgo de sufrir una trombosis venosa profunda (TVP). Sin embargo, en edades más jóvenes es más frecuente en mujeres que en hombres”, precisa el doctor Frías Vargas.
A la hora de prevenir las trombosis estos días, el médico de familia mantiene que se pueden evitar de forma general siguiente una serie de sencillas recomendaciones:
.- Estimular el ejercicio y evitar el sedentarismo. Caminar favorece la activación de la bomba plantar y el retorno venoso.
.- Después de una cirugía, intentar ponerse en movimiento lo antes posible.
.- Hidratarse adecuadamente.
.- Evitar estar mucho tiempo de pie o sentado de manera estática. Cambiar de posición a menudo.
.- Tumbarse y elevar las piernas, de vez en cuando, para favorecer el retorno venoso.
.- Evitar el tabaco y el sobrepeso. Hacer cambios en los estilos de vida y conseguir que estos cambios sean saludables: disminuir el consumo de sal, de grasas saturadas, potenciar la dieta mediterránea, etc.
.- Utilizar ropa cómoda y holgada.
.- Evitar traumatismos y también evitar cruzar las piernas.
.- Evitar el uso de anticonceptivos orales que lleven estrógenos en caso de tener otros factores de riesgos asociados, como por ejemplo el tabaco. Si existen factores de riesgo se deberá consultar con el médico.
.- Aplicar agua tibia en las extremidades. El frío favorece la vasoconstricción de las venas, y con ello favorece el retorno venoso.